
Para las comunidades autónomas, explica Vázquez, suponen un «verdadero revulsivo que servirá para agitar el tejido empresarial y generará resultados de transformación de las formas de gestión, de gobierno, de abastecimiento energético o de relación con el ciudadano».
Contratación pública en tiempos de pandemia. Perjudicados gestores públicos y empresas
Durante el webinar, Vázquez ha subrayado que, «aunque se anunciaron mejoras en los cuellos de botella por el Real Decreto Ley 36/2020, esto no ha ocurrido, al menos en lo referente a la contratación pública». «Los cambios son insuficientes, e incluso, en algún caso inservibles. Sigue existiendo una gran desconfianza en el gestor que se traslada al procedimiento que sigue tan burocratizado que para cuando finaliza con éxito un procedimiento ha transcurrido una gran cantidad de tiempo».
Los fondos NGEU suponen un verdadero revulsivo para las comunidades autónomas que servirá para agitar el tejido empresarial y generará resultados de transformación de las formas de gestión, de gobierno, de abastecimiento energético o de relación con el ciudadano.
Vázquez ha indicado que en ese iter temporal «siguen saliendo perjudicados los gestores públicos que tienen que acelerar en la preparación del contrato – y a veces no hacen uso correcto de los instrumentos que la LCSP les ofrece, como las consultas preliminares -, y las empresas con escaso plazo para preparar sus ofertas».
En este sentido, Javier Vázquez afirma que «debe adoptarse, como ya ha ocurrido en otros países europeos, una norma simple, sin carácter reglamentista, que rompa con la actual y que se base más en principios como integridad, transparencia que en preceptos y limitaciones espurias».